Kynoto Sushi Bar es uno de esos restaurantes que deberían aparecer en todos los posts titulados “Los mejores restaurantes de Barcelona para celebrar un perfecto San Valentín”. El local, la decoración, la iluminación, su recóndita ubicación… todo convierte el Kynoto en uno de los restaurantes japoneses más románticos de Barcelona. Ideal para una cita.

Kynoto Sushi Bar abrió hace 13 años en una calle con poco tránsito en el Gòtic, muy cerca de Correos. Iluminado de manera tenue, como para no llamar la atención, cuenta apenas con tres barras en la parte de abajo, desde las que se puede ver cómo trabaja el sushiman, y seis mesas en la pequeña sala de arriba, cálida, tenue y muy sutil. Todo muy romántico, como decíamos.

Su propuesta gastronómica, lógicamente, se basa en el pescado crudo. Makis, uramakis, sashimis, gunkans y tatakis conviven en la carta con tartares, yakisobas o ensaladas de algas.

En nuestra visita, empezamos con unas gyozas:  Las típicas empanadillas japonesas que aquí hacen con relleno de verduras y carne.

La sopa miso, que cada vez nos gusta más, estaba espectacular. Es, además, un plato saludable, con innumerables beneficios para nuestra salud. De hecho, según la mitología japonesa, el miso fue un regalo que los dioses hicieron a la humanidad para garantizar la salud, longevidad y felicidad del hombre. Por lo visto, dicen que es un plato relativamente sencillo de hacer, así que en breve lo haremos en casa, a ver qué tal nos sale.

Tras los entrantes, íbamos a pedir un tartar de frutos del mar pero Tito, el propietario del Kynoto, nos recomendó que pidiéramos el de salmón. En seguida supimos por qué: Lo marinan en mango, una idea estupenda que le da un sabor inesperado y poco usual.

Acabamos con dos tipos de uramakis (los makis invertidos,con el arroz por fuera y el alga dentro , rodeando los ingredientes). Pedimos uramakis Dragon, de anguila ahumada y caramelizada, huevas de massago, pepino y cobertura de aguacate con salsa teriyaki.

Y un clásico, uramaki California: Con salmón, aguacate, pepino, tamago y cobertura de sésamo.

Os dejamos la ubicación y os recomendamos que le hagáis una visita.

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