Post a cargo de Florans Zherar, bloguer invitada de Cenar en Barcelona. Autora del blog Descubre Bulgaria.

Hoy nos acercaremos a una cocina distinta a la mediterránea. Viajamos al este de Europa, concretamente a Bulgaria.

La cocina búlgara es una mezcla de culturas y de historia. El país en sí está situado en un cruce de caminos, lo que ha conllevado que muchas naciones pasaran por sus tierras y dejaran algún legado. Algunos lo hicieron en forma de fortalezas y monasterios y otros enriqueciendo la gastronomía búlgara, por lo que en ella podemos ver toques de la cocina turca, griega, serbia, etc.

Es una cocina rica en especias, con una base abundante de carne y de queso blanco (parecido al feta).

En Barcelona podemos descubrir alguno de los platos más típicos de Bulgaria en el restaurante llamado Moni Pres, situado justo en la entrada de Barcelona por la ronda de Dalt, muy cerca de la parada de metro Vía Julia. Para ser exactos en la C/Flor de Neu 82.

Es un restaurante que lleva poquito tiempo abierto, es grande y tiene una decoración típicamente búlgara. Los dueños son una familia búlgara adorable, os atenderán de maravilla y no os dejarán ir con hambre. 🙂

La carta principal está en búlgaro pero también la tenéis traducida al castellano. Si no os decantáis por algún plato en concreto, no dudéis en preguntar. Os recomendarán cosas muy ricas, típicas y preparadas al momento. Y para los más escépticos,  también hay platos españoles.

Hay una gran variedad de ensaladas, cosas para picar y carnes. Además, es el lugar perfecto para los amantes del queso. 🙂

Nosotros comenzamos picando unas patatas soté con una cerveza búlgara. Aunque hay muchos tipos  diferentes, nosotros tomamos la Kamenitza. Estas patatas son una alternativa perfecta a las patatas bravas, llevan varios tipos de especies y se sirven sin salsa.

Otra opción muy típica búlgara son las patatas fritas con queso blanco (feta).

Seguimos con las ensaladas: Nosotros somos fans de la más típica, que es la Shopska: Pepino, tomate, pimiento, cebolla y queso feta. Pero tenéis varias para elegir, como la Snejanka o literalmente la Blancanieves, a base de yogur y pepino.

También pedimos un pimiento relleno de queso feta y huevo llamado Chushka biurek. Se sirve por unidad, así que podéis pedir una para probar. 🙂

Ya que éramos varios nos pedimos una Mesena Skara, o lo que viene a ser una parrillada pero con carnes típicas, como son los kebabcheta y kiufteta, que también se pueden pedir por unidad con la guarnición que guste.

Otra opción muy buena es la Kavarma de pollo con verduras y gratinada con queso.

Todo acompañado por un buen vino búlgaro, en este caso un Merlot Rusensko.

De postre, siempre pedimos la tarta de galletas o biskvitena torta, es casera y está para chuparse los dedos. 🙂 Aunque hay varias opciones, preguntad siempre por lo casero y acertaréis.

Los precios son más que razonables, ya que las ensaladas rondan los 4 o 5 € y los platos principales unos 7€. Aunque por ejemplo una unidad de kebabche cuesta tan sólo 1,60€.

Así que a los amantes del queso, de las nuevas culturas y del buen comer, os recomiendo al 100% este lugar en el que comeréis como reyes y os sentiréis como en casa. 🙂

Su horario es de 9:00 a 02:00 cada día.

Y si os ha gustado este viaje a los sabores búlgaros, podéis descubrir más sobre los platos típicos de este país en este post de Florans: 7 platos que probar en Bulgaria.

Estamos en Facebook. ¿Nos sigues?